martes, 7 de agosto de 2012

Prepagas solicitaron una reunión “urgente” con la Superintendencia de Salud.-

Prestadores, sanatorios y clínicas enviaron una carta a las autoridades de la dependencia perteneciente al Ministerio de Salud. Aseguran que no tienen recursos para afrontar las paritarias.
Ante la inminente homologación de la paritaria en el sector, empresas prestadoras de medicina prepaga, clínicas y sanatorios enviaron una carta a la Superintendencia de Servicios de Salud para solicitar “una audiencia con carácter de urgente”. 
En ese sentido, el sector privado precisó a esa dependencia del Ministerio de Salud que no disponen “de los suficientes recursos financieros para afrontar una actualización arancelaria”.
En el escrito, que trascendió a los medios, los firmantes califican de “insostenible” la situación que deberían “afrontar en el supuesto caso de que dicha paritaria sea firmada sin el correlato de una actualización arancelaria acorde con la magnitud del porcentaje pretendido por el Gremio de la Sanidad del 25%”.
Asimismo, las prestadoras informaron a la Superintendencia que solicitaron a la Asociación de Clínicas y Sanatorios de la República Argentina, la entidad que los nuclea, que “se abstenga de firmar hasta tanto se concrete la solicitud de Audiencia”
———————————————————————————————–
Como Moreno no las autoriza a subir la cuota, se niegan a pagar los aumentos salariales.
Un conflicto se incumba en la medicina privada, luego que la paritaria de la Sanidad acordó una suba del 25 por ciento en tres cuotas para los 70.000 trabajadores de clínicas, sanatorios, establecimientos geriátricos, psiquiátricos y entidades prestadoras de servicios de salud. El aumento arranca en agosto con un 15%, otro 8% en diciembre y un 2% desde febrero de 2013.
Sin embargo, la principal cámara empresaria – ADECRA- dice que no los puede pagar porque la Superintendencia de Servicios de Salud, ahora a cargo de la santacruceña Beatriz Korenfeld, y la Secretaria de Comercio Interior, de Guillermo Moreno, no autorizaron el aumento a las prepagas.
Y entonces estas entidades no les reconocen a las clínicas y sanatorios los mayores honorarios y aranceles que surgen del incremento de los costos, incluidos los que se originan en la paritaria.
“Una vez que nos autoricen a subir las cuotas, en la misma proporción, les actualizamos a ustedes”, les dijeron las prepagas a ADECRA. Con este esquema, las clínicas y sanatorios dicen ser el jamón del sándwich.
Previendo estos aumentos, semanas atrás y como marca la ley de medicina privada, las prepagas pidieron a la Superintendencia la autorización para aumentar las cuotas un 15% y otro 9% en diciembre. Y hasta mandaron cartas a sus afiliados anunciándoles el aumento solicitado. De inmediato, a través de un comunicado, la Superintendencia aclaró que no había autorizado ningún aumento .
Las clínicas descuentan que, como viene pasando en los últimos años, las prepagas obtendrán la autorización para subir las cuotas. Lo que les preocupa es la demora y el porcentaje que finalmente autoricen porque argumentan que, sin actualización, no podrían pagar los salarios con aumento. Y eso llevaría a un conflicto con FATSA, el sindicato que agrupa a médicos, enfermeras, mucamas y personal administrativo.
Al Gobierno le preocupa la incidencia de la suba de la cuota en la inflación y en le humor de la clase media.
Las prepagas tienen 2 millones de afiliados voluntarios y otros 4 millones que derivan sus aportes a través de una obra social. Pero también evalúan el impacto de eventuales paros si los trabajadores no cobran el aumento.
Ismael Bermudez
Clarin
4/8/2012

No hay comentarios: