martes, 4 de octubre de 2011

Buscar trabajo después de “los 50″.--

Cuando se realiza una búsqueda laboral, la edad es uno de los datos más relevantes y  para muchos el N° de documento es un impedimento  a la hora  de calificar para  el puesto deseado.
En realidad, hay distinto tipo de personas que quedan sin trabajo y tienen más de 50 años; despedidos, cesantes  en sus contratos,   indemnizados por empresas que cierran o prejubilados. Según los datos del  estadísticos, hay casi 900.000 personas que han cumplido los 50 años, que buscan empleo..
Paralelamente a cierta disminución de estas búsquedas por parte de algunas multinacionales, hay empresas  que están requiriendo el” know-how “de aquellos que alguna vez ocuparon puestos en empresas internacionacionales.
 Muchos de ellos  están disponibles y tienen más de 50 años.  Se destaca el valor de la experiencia  y reconocen los conocimientos que el empleado  ha construido en las diversas situaciones laborales , al tener seguramente que resolver las  situaciones  complejas que imponen hoy las empresas.
 Se revaloriza la experiencia por entender que los mayores poseen una solidez que muy difícilmente pueda encontrarse en un joven que  está ingresando al ámbito laboral.

 Cómo dar batalla “a los 50”
Empezar de nuevo no es empezar de cero. Eso lo saben muy bien los trabajadores que, afectados por prejubilaciones forzosas o por planes de regulación de empleo, han logrado aprovechar su alta cualificación profesional, sus años de experiencia y sus ganas de trabajar para su reinserción en el mercado laboral.
Pero no hay que engañarse: la tarea no es sencilla. Quedarse sin empleo es traumático a cualquier edad y mucho más si el afectado se acerca o supera el medio siglo de existencia, porque es público y notorio que la mayoría de las empresas prefieren apostar por los recién recibidos, que por la capacidad laboral demostrada durante años.
 
Y para muchos de los que siguen activos tampoco es fácil asumir las crecientes dificultades que encuentran a la hora de ser promocionados en las empresas a las que han servido fielmente durante años, debido, simplemente, a su edad.
Aunque no existen recetas los  especialistas  resaltan la importancia de evitar el desánimo evitando  pensar : “no hay trabajo y con 50 años no voy a encontrar” esto es,  evitar la “profecía autocumplida “  que indica que que  detrás  la frase”no hay trabajo” se aloja un sujeto actúa para no encontrarlo. ( el que sueña que se ahoga se ahoga”)

Por lo general el camino comienza elaborando un buen Curriculum, actualizado,que defina bien el perfil y los conocimientos   y competencias   que a lo largo de la vida laboral se fueron acumulando. Hay que saber “vender” la experiencia que se posee, definiendo bien las funciones y cargo desempeñados.
Es muy  importante revalorizar la experiencia  recogida a lo largo de la vida, teniendo en cuenta que, en muchos casos, conseguir un puesto es más una cuestión de actitud que de aptitud . Por eso trabajar con la autoestima es otro de los puntos fundamentales a la hora de plantearnos la búsqueda.
Hay que poder ampliar la red de contactos, esto puede dar buenos resultados”
Las víctimas de  discriminación por la edad –seguramente la menos oculta de todas cuantas existen- cuentan con ayuda  para no enfrentarse solos a esta situación. Diferentes organismos nos ofrecen distintas posibilidades en función de nuestras aspiraciones.

Buscar asesoramiento en  diferentes organismos y empresas privadas, generalmente en colaboración con entidades públicas, tiene sus resultados. En general  ofrecen programas diseñados a la medida y con la ventaja que, además de formación si es que la necesitamos, nos ayudan a recuperar la confianza perdida.
Otros recurso muy utilizado  es  incorporarse en  las asociaciones de  desocupados que ofrecen asesoramiento sobre la búsqueda de empleo y  cursos  subvencionados, bolsas de trabajo y, en algunos casos, apoyo psicológico a través de personal especializado.
Además  se  intenta convencer a las empresas  que los trabajadores  con experiencia conforman una de las mayores riquezas para la compañía  y que pueden resultar  un aporte interesante para que sean cultores de los más jóvenes.
 
Los cambios demográficos derivados de la mayor expectativa de vida en la población obligarán   en el futuro a los directivos a valorar  esta la contribución efectiva  de los empleados seniors.
Es importante  sensibilizar a las empresas sobre las ventajas que supone este tipo de contratación que gestiona la diversidad  al convocar  y reinsertar a gente de todas las edades.

Los excluidos del mercado laboral son en muchas ocasiones buenos profesionales en su materia. Cuentan con un bagaje de conococimientos que les permiten pensar en la autoocupación. El problema es que para poner en marcha un negocio hace falta algo más que voluntad  e ilusión. Hay que ser capaz de analizar la viabilidad económica, conocer la inversión que es necesario realizar y las posibles subvenciones.

Lic. Liliana Rita Moreno
Recursos Humanos y Contenidos

No hay comentarios: